Publicación #242, Octubre12, 2022

El acto de escoger líderes: desarrollo de gente

Tarde o temprano, todo líder se verá en un periodo de cambio de su liderazgo. Estas transiciones bien pueden ser por elección propia, por las circunstancias, por el llamado de Dios, o simplemente por el paso del tiempo. Así que, todos los líderes o vienen de una transición, o están trabajando en una en la actualidad, o están sentando los fundamentos para una transición futura.  Al escribir esto, yo mismo estoy pasando por una transición en mi liderazgo. Así que quizás estoy escribiendo esto para mi propio beneficio, pero te invito a que descubras junto conmigo de qué forma los líderes-siervos realizan una transición. Examinaremos la transición final de la vida de Moisés en donde nos modela los ABC’s de las transiciones: reconocer las realidades, bendecir al sucesor y valorar las relaciones.  

 

Ahora, Israel, escucha con atención los decretos y las ordenanzas que estoy a punto de enseñarte. Obedécelos para que vivas y para que puedas entrar y poseer la tierra que el Señor, Dios de tus antepasados, te da…. 4 Sin embargo, ustedes, todos los que fueron fieles al Señor su Dios, todavía siguen vivos; todos y cada uno de ustedes.5 »Mira, ahora te enseño decretos y ordenanzas tal como me lo encargó el Señor mi Dios, para que los obedezcas en la tierra donde estás a punto de entrar y que vas a poseer. 6 Síguelos al pie de la letra y darás a conocer tu sabiduría y tu inteligencia a las naciones vecinas. Cuando esas naciones se enteren de todos estos decretos, exclamarán: “¡Qué sabio y prudente es el pueblo de esa gran nación!”. 7 Pues, ¿qué gran nación tiene un dios que esté tan cerca de ellos de la manera que el Señor nuestro Dios está cerca de nosotros cada vez que lo invocamos? 8 ¿Y qué gran nación tiene decretos y ordenanzas tan justas e imparciales como este conjunto de leyes que te entrego hoy?” (Deuteronomio 34:1, 4-8).

 

En un momento Moisés era el gran líder de una nación y en el siguiente, había hecho la transición hacia su recompensa eterna. Lo primero que los líderes-siervos pueden aprender de esta transición es a reconocer tres realidades.  

 

Reconoce la realidad de lo que se ha hecho. Moisés había liderado a la nación a través de tiempos muy difíciles. Estoy seguro que conforme fue subiendo lentamente la montaña, pudo recordar cómo se partió el Mar Rojo, los 10 Mandamientos, el agua que salió de la roca y otros eventos importantes de sus 40 años de liderazgo. Se habían logrado muchas cosas.  Los líderes-siervos reconocen con gratitud a Dios todo lo que se pudo lograr. Y cuando han liderado bien, seguramente han hecho muchas cosas. No están orgullosos de ellos mismos pero son capaces de celebrar la realidad de lo que Dios ha hecho.  

 

Reconoce la realidad de lo que aún falta por hacer. Dios le permitió a Moisés tener un vistazo de la tierra que su pueblo había de heredar. Puedo sentir el dolor de Moisés al escuchar las palabras de Dios, “Tú no vas a cruzar hacia ella”. Durante años Moisés se encargó de mantener viva la visión y ahora le tocaba a él irse y aún faltaban muchas cosas por hacerse.  Cuando los líderes-siervos enfrentan una transición, reconocen que aún hay cosas por hacer. Ya sea que haya sido por sus propios errores (como en el caso de Moisés), o simplemente porque ha llegado el tiempo de la transición, aceptan la realidad que aún faltan muchas cosas por hacer. Entienden que la visión de Dios siempre es más grande que el liderazgo del líder y que hay aspectos que no serán resueltos antes de la transición.  

 

Reconoce la realidad de lo que se hará en el futuro. Al mirar la tierra que sería de Israel, Moisés podía ver lo que iba a ocurrir una vez que él no estuviera. Otro líder haría lo que él no pudo hacer.  Esta dolorosa realidad no es fácil de aceptar para los líderes. Algunos líderes no reconocen la realidad de que se están haciendo viejos. O que ya han hecho todo lo que pueden para la organización. O que es necesario que otras personas con nuevos dones y talentos entren a la organización y “le inyecten sangre fresca” a la visión. Pero los líderes-siervos aprenden de Moisés a reconocer esta realidad cuando ha llegado la hora de la transición.  Los líderes-siervos en transición celebran lo que se ha logrado a la par de reconocer que Dios usará a otro líder para alcanzar lo que no se ha hecho. Reconocen estas realidades al seguir la dirección de Dios en la transición. Claman a Dios para que guarde sus corazones contra todo orgullo, celos o envidias, o sentimientos de fracaso. Están dispuestos a seguir sirviendo en el lugar al que Dios los llame.

  Para mayor reflexión y debate:

 

  • En las transiciones que me ha tocado ver  ¿he podido ver a líderes que reconocen correctamente las realidades? ¿Cómo he identificado a aquellos  líderes que no las reconocen correctamente?
  • En transiciones en mi liderazgo ¿qué tan bien he reconocido lo logrado y lo que aún falta por hacer? 
  • En mi rol actual ¿qué necesito hacer hoy para prepararme para una buena transición?  

En la siguiente publicación examinaremos la “B” en los ABC’s de las buenas transiciones:  

Reconocer las realidades 

Bendecir al Sucesor 

 

Valorar las Relaciones

Hasta la próxima, suyo en el peregrinaje,

Jon Byler

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Reflections for Serving Leaders is published by Center for Serving Leadership and Jon Byler. Copyright, 2022

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