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Bernabé: Servir con Carácter
Publicación #335, Abril 30, 2025
Hemos observado varias de las acciones que hicieron de Bernabé un líder de servicio eficaz. Al concluir este repaso de su vida, miraremos debajo de la superficie para observar dónde estaban arraigadas estas acciones. En una de las primeras menciones de su vida nos enteramos de que era un 'hombre bueno'.
22 Llegaron noticias de esto a la iglesia de Jerusalén, y enviaron a Bernabé a Antioquía. 23 Cuando llegó y vio lo que había hecho la gracia de Dios, se alegró y animó a todos a permanecer fieles al Señor de todo corazón. 24 Era un hombre bueno, lleno del Espíritu Santo y de fe, y un gran número de personas fueron llevadas al Señor (Hechos 11: 22-24).
Bernabé era un «hombre bueno», la evidencia de su carácter. Su carácter fue la base de la cual fluyeron todas las demás características maravillosas de su vida. Él muestra a todos los líderes que sirven que servir a los demás comienza con lo que somos.
El carácter sirve para señalar quiénes somos.
Bernabé estaba «lleno de fe y del Espíritu». Este era el núcleo de lo que era. Su buen carácter indicaba de qué estaba lleno. Algunos líderes tratan de controlar lo que la gente ve y se esfuerzan por dar forma a sus acciones, con la esperanza de ocultar la realidad de lo que son por dentro. Pero cuando la presión aprieta, lo que hay dentro sale a la luz en forma de una palabra dura, una mirada airada o un afán de poder. Las acciones no determinan el carácter, sino que lo revelan. Los líderes que sirven se centran en llenarse del contenido adecuado. Tienen cuidado con lo que leen, lo que ven y lo que piensan. Reconocen que su carácter señala al mundo quiénes son.
El carácter sirve para dar forma a lo que hacemos.
«...se alegró y les animó a permanecer fieles al Señor de todo corazón». Cuando Bernabé llegó a la iglesia de Antioquía, observó lo que estaba sucediendo y respondió con ánimo. ¿Por qué? No necesitó detenerse a pensar cuál sería la mejor respuesta de liderazgo. Simplemente permitió que su carácter moldeara su respuesta. Animó porque era un animador. Grandes resultados siguieron, «Un gran número de personas fueron llevadas al Señor». Algunos líderes sopesan cuidadosamente las pérdidas o ganancias potenciales basadas en sus acciones y deciden qué hacer basándose en cómo avanzará u obstaculizará sus propios objetivos. Pero los líderes que sirven cultivan el buen carácter y luego permiten que eso moldee lo que hacen. Hacen lo correcto, no lo conveniente. Hacen lo que es necesario, no lo que es conveniente. Su carácter les ayuda a centrarse en las ganancias a largo plazo en lugar de en las ganancias a corto plazo. Pueden confiar en su carácter para dar forma a lo que hacen.
El carácter sirve para dirigir hacia dónde vamos.
Bernabé fue enviado por los líderes de la iglesia para servir en Antioquía. Reconocieron la bondad de su carácter y eso le abrió las puertas a mayores niveles de responsabilidad. Confiaban en él porque conocían su carácter. Esta confianza lo llevó a su siguiente asignación. Algunos líderes buscan avanzar alineándose cuidadosamente con las personas correctas o calculando a dónde van basados en sus resultados deseados. Pero los líderes que sirven cultivan un carácter que les abre puertas y les dirige en la dirección correcta. Su carácter sirve como herramienta de navegación que les lleva a donde pueden servir mejor.
La vida de Bernabé es un caso de estudio de un hombre que sirvió bien por ser quien era. Desafía a todos los líderes que sirven a desarrollar su carácter y permitir que su liderazgo fluya de él.
Para mayor reflexión y debate:
· ¿De qué manera el personaje de Bernabé me desafía como líder? ¿Qué puedo hacer esta semana para parecerme más a él?
· ¿De qué estoy lleno? ¿Cómo se evidencia esto en lo que soy en el fondo de mi vida? ¿Qué hago para estar lleno de aquello que produce buen carácter en mi vida?
· ¿Qué es lo que determina mis acciones? ¿Permito que mi carácter dé forma a lo que es correcto hacer o me centro en cómo reaccionarán los demás o en cómo la decisión hará avanzar mis propios objetivos?
· ¿Qué guía mi avance? ¿Son mis propios esfuerzos para trazar un rumbo que me lleve adonde quiero ir, o es mi carácter el que abre puertas para servir?
· ¿Qué estoy haciendo para fortalecer mi carácter? ¿Hay áreas de mi carácter en las que necesito pedir a Dios y a los demás que me ayuden a crecer?
Hasta la próxima, suyo en el peregrinaje,
Jon Byler
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